lunes, 22 de agosto de 2011

Día 11 - 21 de agosto 2011

Hoy ha sido nuestro último día por tierras yankis, y qué mejor manera de despedirnos de este país y de Las Vegas, que haciendo algo típico de esta ciudad, CELEBRAR UNA BODA!!!

Pero tranquilos… no la nuestra.

Unos amigos de Esther se casaban y coincidencias de la vida, estábamos “en el sitio adecuado y en el momento oportuno”.

Hicimos el check-out en nuestro hotel y nos dirigimos al hotel donde se alojaban los novios, el Ballys.
Pedro nos estaba esperando en la recepción, guapísimo, y Mayte dándose los últimos retoques en la habitación, estaba radiante.

En la puerta del hotel nos esperaba una limusina blanca, enorme, que nos llevó hasta la Capilla.


Ha sido toda una experiencia pasear en este coche por la strip, sonando la famosa canción de Elvis Presley, Viva las Vegas y nosotros como locos, cantando y bailando. La boda ha sido preciosa, y totalmente oficial, en contra de lo que creíamos que representaba casarse en Las Vegas.

En la Capilla se rellenan los papeles que luego se presentan en el registro civil, se pagan unas tasas, y te dan los papeles para presentarlos en la Capilla y validar después el matrimonio en nuestro país.


De vuelta a la Capilla ya se ha oficiado la ceremonia, y nosotros, a petición de los novios, hemos hecho de testigos.
Antes de la boda...un vistazito al Sport
Al acabar la ceremonia queríamos celebrarlo “como dios manda”, con cava, y así hacerles un pequeño obsequio a los recién casados. Nuestra sorpresa ha sido que no nos podían vender alcohol y la botella que parecía de cava, era de mosto, pero que con el calor que hacía y lo fresquito que estaba, nos ha sentado estupendamente.


La limusina nos ha llevado de vuelta al hotel y allí ya nos hemos despedido de Pedro y Mayte, porque a nosotros nos quedaba un largo viaje hacia Los Ángeles, que es donde cogíamos ya, el avión de vuelta.

Antes de salir de Las Vegas nos hemos pasado por Fremont Street, que es la calle a partir de la cual se originó la gran ciudad que es hoy Las Vegas.


Es una calle para visitarla de noche obligatoriamente, por la impresionante pantalla que la cubre y por sus numerosos carteles luminosos, que claro, de día están apagados y pierde bastante de su encanto, pero nosotros ya no teníamos más tiempo y corriendo cogimos el coche para Los Ángeles.

Nos pusimos bastante nerviosos al salir de Las Vegas, porque estuvimos más de tres horas parados en caravana, teníamos miedo de perder el avión. Pero todo salió perfecto, circulamos por la famosa Ruta 66 y nos dio tiempo a llegar al hotel que teníamos reservado, para dormir unas horitas y ducharnos,
ya que nuestro avión salía a las 5.00AM.

BYE BYE USA!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario